Puede que te hayas dejado llevar hasta aquí mecido por las olas o aprovechando la bajada de la pendiente. Es probable que tú ni siquiera desees encontrarte leyendo estas líneas o tal vez hayas esperado a estar a solas para encenderte un cigarrillo y te descubras en este lugar, que pertenece a ninguna parte, por propia voluntad.
Sea como fuere, ya has presenciado el crimen.
Y ahora formas parte de esto.
Ya eres Testigo de mis Errores.

martes, 1 de junio de 2010

Miedos I

Me aterroriza la idea de que al tantear la pared buscando el interruptor, una mano pueda posarse sobre la mía.

2 comentarios:

  1. Esto pasa mucho ,no lo de tener miedo ,si no a que una mano te agarre en la oscuridad .Mucho ,a todas horas ,pero sobre todo por la noche a oscuras ,cuando estás solo en tu habitación .

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